Confiesa que el tenis la encontró por casualidad: “Cuando tenía 13 años, un día en el muro del condominio había un cartel que avisaba de clases de tenis. Ahí mis papás me dijeron que fuera a ver qué onda, por si me gustaba. Cuando fui, de a poco me fui entusiasmando y me quedé jugando hasta ahora”. Lo encontró divertido y se entretenía harto. Además, el hecho de competir contra los demás niños le gustaba “siempre quería ganar”, rememora.
¿Algún partido que recuerdes?
¿Algún partido que recuerdes?
“El primer partido que jugué fue de la Federación, fue el "GA Copa Mil". Bueno, perdí en primera ronda, pero aprendí mucho. Otro de mis partidos más importantes fue uno en Llo-Lleo de la Federación también, fue muy peleado para poder irnos al tercer set, pero lo perdí. Me puse a llorar cuando terminé porque lo podría haber ganado. Uno más reciente fue en el "GA Copa Milo" dobles que perdimos en tres sets y podríamos haber ganado, porque también estuvo muy peleado”.
Reconoce que su mejor golpe es su derecha, pero de lo que no está segura aún es de dedicarse profesionalmente al tenis. Por ahora piensa solamente en jugar bien para conseguir una beca deportiva en la universidad, para jugar torneos. En cuanto a lo que ella ve del circuito, nos cuenta su opinión: “Hay mucho menos mujeres buenas que en los hombres. El circuito masculino tiene más jugadores buenos. Además los tenistas chilenos tienen muy poco apoyo, en comparación al extranjero. En otros países hay mayor posibilidad de llegar a ser profesional porque hay mejores entrenadores y las puertas están más abiertas”.
Sus pasos tenísticos ahora son poder entrar dentro de las top ten y mejorar su juego.
Reconoce que su mejor golpe es su derecha, pero de lo que no está segura aún es de dedicarse profesionalmente al tenis. Por ahora piensa solamente en jugar bien para conseguir una beca deportiva en la universidad, para jugar torneos. En cuanto a lo que ella ve del circuito, nos cuenta su opinión: “Hay mucho menos mujeres buenas que en los hombres. El circuito masculino tiene más jugadores buenos. Además los tenistas chilenos tienen muy poco apoyo, en comparación al extranjero. En otros países hay mayor posibilidad de llegar a ser profesional porque hay mejores entrenadores y las puertas están más abiertas”.
Sus pasos tenísticos ahora son poder entrar dentro de las top ten y mejorar su juego.
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